miércoles, 26 de noviembre de 2008

Conociendo a los Atletas Tricolores (Nestor Guerra)

A Guerra se le puede destacar su mentalización frente al esfuerzo que supone salir no sólo a correr, sino ganar una maratón. Pero no podemos olvidar que la naturaleza lo ha dotado de capacidad física suficiente como para responder a las exigencias que el cerebro le plantea. A lo largo de la conversación he tratado de averiguar aspectos de su experiencia deportiva para comunicárselo a los lectores, de modo que así puedan ser útiles a otros atletas.
Rudemar Antonio Blanco Oliva.


Guerra Néstor
Si se quiere se puede.

Blanco: ¿Cuál es tu nombre y edad?
Guerra: Mi nombre es Néstor Guerra, tengo cuarenta y seis años. Comerciante.

B: ¿Donde naciste?
G: Nací en San Carlos departamento de Maldonado.

B: ¿La Escuela la hiciste allí?
G: Sí, en la Escuela número 3 Juan de Dios Curbelo, hice primaria y dos años de secundaria.

Blanco: ¿Dime tus primeros pasos en el deporte?
Guerra: Fueron cuando iba al liceo, antes de eso trabajaba mucho con mi padre en la panadería. En el liceo se hacía salto largo, salto alto, eso…vengo de una familia que tenía panadería y había que ayudar, y no había tiempo para otras cosas.

B: ¿Y cuál fue tu primer deporte?
G: Sí… a los trece mi primer deporte, así oficial, fue el ciclismo. A los trece años empecé con la bicicleta, ya había dejado el liceo. Me armé una bicicleta con pedazos y empecé a correr.

B: ¿Por qué el ciclismo?
G: Yo andaba todo el día en bicicleta haciendo el reparto, había desarrollado unos músculos bárbaros. Me encantaba la bicicleta, me armé una y empecé a entrenar.

B: ¿Corriste alguna competencia formalmente?
G: Si corrí formalmente, mi primera carrera yo creía que iba a ser una cosa bárbara pero fui un desastre. Y entré último, como soy muy orgulloso y de la vergüenza dije: -¡No corro nunca más! Habían ido mis padres a verme, mis hermanos, mi novia y todos... ¡paaa…, entré último y lejos del pelotón!

B: No creo que abandonaras.
G: No, ese día mi padre que era amigo de un entrenador le dijo que me preparara él. El hombre me dio un poco de ánimo, que me entrenara que tenía condiciones, y le dije: -Bueno voy a entrenar un poco más. -En quince días era la segunda etapa. En la segunda etapa ya entré segundo, nada que ver, estuve con el pelotón todo el tiempo. Fue la primera vez que salía en un diario, todavía tengo el recorte, el recorte tiene más de treinta y cinco años. Era en la categoría Prejunior.

B: ¿Corriste mucho tiempo?
G: Si corrí como dos o tres años y después dejé. Corrí como tres años y andaba en los primeros lugares. Después cuando tenía diecisiete años me estaba por casar y se me terminaron las carreras.

B: ¡Que joven te casaste!
G: No, no me casé, habíamos comprado todo, teníamos todos los muebles y todo y no me casé. En esa época allá las chiquilinas de catorce, quince años, andaban con los niños en los brazos.

B: Que interesante que en esa época ya pasara eso. Ahora no es raro, pero en esa época en el pueblo es muy interesante.
G: En mi pueblo con quince años ya los muchachos eran casados. Sí, los ciclistas tenían quince años y eran casados, tenían hasta hijos algunos de ellos. Suerte que no me casé.

B: ¿Hiciste algún otro deporte?
G: Hice un año de fútbol en el Nacional de San Carlos. Tenía la ventaja que corría mucho más que todos ellos. Cuando salía a correr para entrenar los subía a cacunda y corría con ellos arriba. Y ese año jugué porque cuando ellos no podían más yo seguía corriendo como al principio. Después seguí con el Karate, estuve once años practicando karate.

B: ¿Cómo es esa historia del karate?
G: Fui tercero a nivel nacional, hice varias disciplinas, me gustaba mucho aprender. Y eso que trabajaba de noche. Hice varios estilos.

B: ¿Las competencias son de acuerdo al estilo?
G: Ahí va. Y hay algunas que son libres. Mi última actuación fue en un campeonato aquí en Pando que participaron trescientos competidores y salí tercero.

B: ¿Cuándo empezaste con tus primeras carreras?
G: Mi primera carrera fue una quijotada. Me encontré con los amigos que iban a correr dos días antes de la carrera. Se corría la San Fernando el seis de enero, en esa época venía corredores de todos lados…los keniatas, los que corrían la San Silvestre venían todos. Fue por el año ochenta cinco, era la única carrera que daba cincuenta medallas en el Uruguay. Por supuesto que no agarré ninguna de ellas. Me invitaron a ir a correr los amigos que se estaban preparando y yo tenía un rostro bárbaro. Me acuerdo que me maté corriendo, y bueno, llegué a la línea y me desmayé, pasé la línea y me desmayé del esfuerzo. Entré entre los primeros doscientos más o menos.

B: ¿Y la corriste otra vez?
G: Sí, ahí mismo cuando me enteré que eran sólo cincuenta medallas, dije:-El año que viene voy a ganar una medalla y me empecé a preparar. Y al año siguiente entré en el lugar treinta y siete. Me acuerdo que iba todo el mundo a ver la medalla y ahí me motivé.

B: Me has contado de tu primera maratón. ¿Cómo fue esa carrera?
G: Una vuelta me dieron manija para que fuera a correr cuarenta y dos kilómetros a Montevideo. Yo estaba creído que corría, todos me decían que no llegaba. Mira, me dijeron un día, hay una carrera de cuarenta y dos kilómetros de Pando a Montevideo y termina en la pista, trofeo para todo el que llega.
Empecé a entrena en los quince días que faltaban.

B: ¿Y te anotaste?
G: Fui el día de la carrera, con una cantidad de problemas hasta que ese día me anotaron. La carrera la organizaban la Confederación y la Agrupación.
Tuve que irme a Montevideo y después de ahí para Pando por que no había coche para ir a Pando directo. Era un día Dieciocho de Julio, tocaron y cantaron el himno y largamos. Largué y dije: -Que despacio que va esta gente. Iban diez kilómetros y seguía en la punta con el pelotón. Esto es una papa pensaba yo; claro los tipos iban despacio por que eran cuarenta y dos. Yo no tenía ni idea, a los quince kilómetros se me empezó a acabar la nafta, ¡a los veinte kilómetros me pasaba cada veterano!
Yo decía éste no me puede pasar, apuraba y lo pasaba, al ratito otra vez venia al tranquito, tingui, tingui, tingui, y me volvía a pasar él a mí. Casi me muero en esa carrera, veintiséis años tenía, llegué deshecho. Largaron cien esa carrera, llegaron sesenta y yo llegué en el puesto cuarenta.

B: ¿Físicamente como llegaste?
G: Llegué destrozado a la pista. El esfuerzo que tuve que hacer fue terrible. Después me di cuenta que fue una locura tremenda, me tiré al piso y estaba muerto de hambre. No podía pararme, para ir al podio a buscar la medalla no podía subir.
Fui a la ONDA, y no podía subir al ómnibus, me dolía todo el cuerpo.

B: ¿Tu mejor tiempo cual fue?
G: Indudablemente que yo empecé a correr bien cuando me vine para acá, para Montevideo, que había carreras todos los domingos. Ahí fue que yo empecé a correr.

B: ¿En que año viniste?
G: Yo vine en el noventa y cuatro.

B: Tenías treinta y dos años, ¡cómo se desperdiciaron tus condiciones para correr. ¿Y tu mejor tiempo?
G: En alguna prueba de calle estuve por debajo de los treinta y dos minutos los diez kilómetros y en los cinco mil catorce cuarenta y cinco. En maratón, corrí como nueve maratones, desde aquella maratón locura que corrí en tres treinta y ocho, después corrí en dos cuarenta y ocho y ahí empecé a bajar hasta los dos treinta y seis.



B: ¡Qué buen tiempo! ¿No?
G: Con ese tiempo fui campeón nacional. Y el orgullo fue que me llamaron para ir a representar la Confederación en un sudamericano. Aquí había una maratón por año y corrí dos, una entre cuarto y la otra la gané.

B: ¿Las otras maratones dónde las corriste?
G: Acá cerca corrí por todos lados. Corrí en Curitiba, en Porto Alegre, en La Pampa…

B: ¿En la Agrupación cuántas veces ganaste?
G: El campeonato de la Agrupación Atlética lo gané tres veces.
Fui vicecampeón sudamericano de veteranos en la media maratón, fui vicecampeón también en un sudamericano de cross country de veteranos. El López Testa de la categoría los gané casi todos los años.

B: ¿Y en qué clubes corriste?
G: Para el Campus, para Defensor, para Cerro, el club Retaguardia, Nacional, y fui campeón con todos los equipos.

B: ¿En Nacional en qué año empezaste a correr?
G: En Nacional empecé a correr en el dos mil uno, formamos un equipo en el que éramos cinco corredores y fuimos campeón en la Agrupación. Éramos cinco, y con ese equipo ganamos el campeonato. Antes como éramos pocos corredores había un equipo sólo por club.
B: Fue el equipo que tuvo mejor tiempo en todas las categorías.

B: ¿Te casaste?
G: ¿Sí, tres veces?
B: ¿En serio?
G: Sí me casé tres veces. Con la primera tengo una hija que está estudiando Psicología. Ella es de Rocha está conmigo, estudiando acá en Montevideo. Después me casé con una persona de Maldonado y tengo con ella dos hijas. Cuando me vine soltero para Montevideo, hace catorce años, me casé con la compañera con la cual estoy viviendo hace más de diez años, y con quien tengo un hijo,

B: ¿Profesas alguna religión?
G: No, no tengo ninguna religión.

B: ¿Y crees en Dios?
G: No, Dios es todo lo que existe, el mar los animales, nosotros, la tierra.
B: La naturaleza.
G: Sí, todo lo que existe, no creo en el Dios que está ahí arriba para castigarte.
Me parece que ese no existe. Polvo eres y al polvo vuelves.

B: Vida en otros planetas del Universo.
G: Pienso que sí porque no vamos ha ser tan ignorante como para creer que somos los únicos que existimos.

B: ¿Tienes una noción de lo que es el Universo? ¿Podrías concebir la idea?
G: No, no puedo, es una cosa imposible de imaginar. Si tuvieras un avión de fantasía que recorriera millones y millones de kilómetros por segundo viajarías y viajarías sin encontrar nunca el fin.

B: La mente no te da para concebirlo.
G: Es tan grande que la mente no te da.

B:¿Tomaste alguna vez alguna droga?
G: No, Jamás. Cuando tenía catorce años fume, porque salíamos y eso de convidar con cigarro, fumé un poquito por paviar y no fumé nunca más.

B:¿Qué fumaste?
G: Tabaco.

B: ¿Y marihuana, o algo para estimularte en el deporte?
G: No, ni se lo que es eso. Para correr cuando me empecé a profesionalizar un poco, yo trabajaba, lo que trataba era tener una buena alimentación, dormir, cuidarse.

B: ¿Te sientes nervioso antes de una carrera?
G: No, después de tantas carreras no siento nervios, habiendo competido en Karate donde no sabes en cada competencia como vas a salir, te pueden quebrar un hueso, aquí es solamente si vas a salir primero o te van a ganar.

B: ¿Y esa ansiedad previa que todos parecen sentir?
G: Esa sí, la parte de ansiedad sí. Que están los corredores, esa emoción sí.

B:¿Cuál fue el entrenamiento que hiciste cuando el año pasado volviste a correr y lograste hacer algo así como treinta y seis en los diez Kilómetros?
G: El médico me había prohibido correr por la artrosis en la rodilla. Yo estoy corriendo igual, y a veces duele, por supuesto que uno no lo va ha estar contando a cada rato, pero, tenía que hacer una preparación muy buena porque a raíz de esa lesión tuve contracturas, desgarros…Hice este año una pretemporada muy buena. El año pasado ya había corrido un año Light, un año a cuarenta, cuarenta y un minutos, suaves para el tiempo en que yo corría.

B: ¿Cómo fue que te preparaste para este año? Desde una carrera hasta la otra.
G: Hice pesas, hice arena, hice monte. La arena para potenciar los músculos corríamos siete u ocho kilómetros por la orilla del agua, las pesas para potenciar todos los músculos de las piernas, y mucho monte, mucho Parque Rivera que eso te fortalece los ligamentos, pisas torcido, pisas doblado, mucho pasto, subidas y bajadas. Y después empecé a ir a la pista que no iba porque siempre andaba mal, me resentía de lesiones viejas. Y bueno con el trabajo de pista, dos veces a la semana, alcance a correr en treinta y seis, en Villa Española corrí en treinta y seis.

B: ¡Con cuarenta y seis años corriste en treinta y seis! ¿Qué hacías en la pista?
G: Hacíamos dos o tres pasadas de mil o dos mil, hacíamos un ochenta y cinco por ciento más o menos.

B: ¿De qué? ¿De la competencia?
G: De tu resistencia física, más rápido de lo que corrías en la competencia. Si corres en cuatro minutos en competencia la pasada de mil tienes que correrla en menos. Eso es lo que te da la velocidad del paso, la resistencia…Cuando corres una carrera más larga como la media maratón ahí haces pasadas más largas para tener más resistencia en la velocidad.

B: ¿Qué hacías durante una semana entera antes de la competencia?
G: Hubieron semanas que teníamos domingo tras domingo competencia. Después de la carrera hacia un fondo suave de diez kilómetros, en un tiempo de cinco minutos diez que es un fondo suave. El martes iba a la pista y hacía por ejemplo seis pasadas de mil. El miércoles hacíamos un fondo un poco más fuerte otros diez u once kilómetros. El jueves otra vez a la pista hacíamos, por ejemplo, doce pasadas de cuatrocientos. El viernes un fondito suave de diez kilómetros, el sábado se descansaba y el domingo se corrían los diez kilómetros.

B: ¿Y cómo te preparabas para el nivel de treinta y dos minutos los diez kilómetros?
G: En ese nivel era: el lunes quince kilómetros suaves, el Marte venía a la pista y hacía velocidad, diez de mil, y de noche hacía un fondo suave.
El miércoles se hacía doble horario otra vez y el jueves se hacía doble horario de vuelta. El viernes se hacía un fondo largo y también se trotaba el sábado, se hacían diez o doce kilómetros. Cuando entrenaba maratón con Flechero me alcanzó a mandar a correr el sábado veinte kilómetros en la mañana, diez en la tarde y al día siguiente corría y ganaba la carrera de diez. En esa época me estaba preparando para una maratón y llegué a correr doscientos kilómetros a la semana. Tenía una sobrecarga impresionante.

B: ¿Aguantabas?
G: Sí, y mira que en esa época ya tenía treinta y siete años.

B: Tengo mucho interés en el aspecto psicológico. ¿Eres conciente del papel que juega?
G: Lo mental es sumamente importante. Cuando estás corriendo siempre te viene un quiebre, una puntadita que te está´molestando, un cansancio, un ahogo o te pasa alguien. Piensas que mal que vengo, te quedas, hay que estar muy fuerte mentalmente.
El no puedo para mi no existe, no existe el no puedo. Si no quiero hacer tal cosa no la hago, pero el no poder no existe. En mi cabeza yo no creo que exista el no poder, y eso puede ser un mensaje para los jóvenes.
Yo fui uno de los que juntaba los números que los otros dejaban en las carreras y ahí ni una medalla.

B: ¿Cómo es eso?
G: El primero, que me ganaba a mí llegaba ocho minutos antes que yo. Cualquier persona normal si quiere llegar llega, seguro, si entrena.
A esos corredores que me sacaban ocho minutos, que era una vida en una carrera, terminé ganándoles.

B: Tenemos un límite biológico y mental cada uno, por encima del cual vienen problemas, o son inalcanzable los resultados. ¿No?
G: Sí, en las maratones por ejemplo se veía que los que entraban primero llegaban deshechos, corredores que estaban mejor entrenados que yo estaban deshechos. Yo me echaba en el piso y no me podía ni dar vuelta. Había una carpa donde te masajeaban, para todos los atletas, y ahí estaban los treinta y nueve que habían llegado antes que yo y era a cual se quejaba más. Yo dije: yo no soy el único jodido entonces. Eso era en Brasil en un sudamericano. Claro que hay un límite.
B: Claro, estaban cerca de su límite, pero tu mensaje de “Se puede” sigue siendo válido dentro de esos límites…

B: ¿Y el no puedo?
G: Pero, el no puedo no existe. Yo conozca el caso de Néstor García, era un gordito, después bajo los record nacionales que hacía tiempo estaban sin mover, y fue a los Juegos Olímpicos. Él le daba para adelante y si atropellaba una pared la partía. Él estaba con los mejores corredores y les decía “A ti tarde o temprano te voy a ganar”.
Los locos se cag… de la risa de él, y les ganó a todos. ¡Les ganó a todos!
Él fue a la Argentina conmigo su primera carrera y le dijo a la televisión que les iba ganar a todos, y no le ganó a nadie. Todos se mataban de la risa de él.

B: ¿Y ganó alguna? ¿Sigue corriendo?
G: Después se cansó de ganar en la Argentina. Estaba convencido que él iba a ser bueno. Sigue corriendo, él después se profesionalizó y corría donde había buenos premios. El que se puede es un mensaje que hay que hacerle entrar a la gente joven.

B: ¿Qué pasó con tu rodilla?
G: La rodilla es una operación de menisco que me hicieron hace veinte años y al no tener menisco, tantas maratones y tantas carreras se me fue haciendo un desgaste del roce de los huesos y eso… Se produjo una artrosis que por más que la cuide está peor.

B: Hiciste toda tu mejor campaña con la rodilla sin el menisco ¡Qué interesante! ¿Ahora te duele cuando corres?
G: Sí, Yo me lesione la rodilla cuando hacía karate. Ahora cuando corrí las medias maratones me dolía, parecía que se me iba a partir la rodilla del dolor. Sin embargo hay días en que no siento nada. Hay días que voy a correr y ya en el calentamiento me está doliendo y hay días que no siento la pierna y ando bárbaro.

B: ¿Qué me dices de tu relación con Nacional?
G: Yo fui siempre hincha a muerte de Nacional. Me daba una tristeza bárbara el que gané tantas carreras con otras camisetas, como con la camiseta de Defensor, de Cerro. Un día vine acá a la sede, de rostro no más, y el que me atendió fue Hucha… Y le digo: yo soy campeón de ésto y de lo otro y me gustaría que Nacional formara un equipo. Manuel Hucha fue con el que hablé, y justo venía la carrera del día olímpico. Corrimos con Moacir Casal. Después armamos un equipo de cinco corredores, yo, Alvaro Ibarra, Moacir Casal, José Pizarro y Julio Barreto y ganamos el campeonato 2001 por equipos de la Agrupación corriendo para Nacional. Y hoy estoy orgulloso de la Directiva que tenemos y de que en estos días vamos a ser federados.
15/11/2008 Rudemar Antonio Blanco Oliva

Tricoatletas en la Ultima Fecha de Media Maraton

El pasado domingo se desarollo en piriapolis la ultima fecha del campeonato 2008 de media maraton, donde se consagraron campeones en sus categorias,


Sergio Delgado (Varones 18 a 29), además subcampeon de la general, tras su bajo rendimiento debido a una lesion en la tercera de las 4 etapas.


Fabian Astesiano (Varones 30 a 34)


Susana Perna (Damas 45 a 49)





Quedando segundos en sus categorias.


Heber Artigas (Varones 18 a 29)


Maritza Giordano(Damas 45 a 49)


Hector Diogo (Varones 45 a 49), detrás de Jorge Pereyra el campeon de la General





Tambien tenemos a Carlos Cirone 6to en varones 50 a 54 años, Laura Cerulo 5ta en su categoria habiendo participado solo dos etapas, Eduardo Bentancor 17avo, habiendo participado solo 2 etapas y Nestor Guerra entre otros



En esta foto de la carrera de 10K del prado, estan de Izquierda a Derecha atras:
Nestor Guerra, Washintong Perez, Carlos Cirone ,Hector Garcia , Rudemar Blanco;
adelante Ivan Guerra, Maritza Giordano, Giuliana Garcia
Laura Cerulo y Susana Pernas

lunes, 17 de noviembre de 2008

Salud Tricolor Campen de Campeones

Salud al campeón del campeonato 2008 de la Agrupacion de Atletas del Uruguay.

Campeón en damas (mujeres 17 años en adelante) En la foto de abajo, figura el equipo femenino del 2008, con la falta de Marisol Redon, atleta que no se encuentra en el país en este momento.

Campeón en Varones A (caballeros de 17 a 34 años), subcampeón en Varones B (caballeros de35 a 49 años) y Campeón en Varones C (caballeros de 50 años en adelante)




Conociendo a los Atletas Tricolores (Jose Amaral)

Cada Encuentro con un corredor me confirma que cada ser humano es la memoria de un tiempo de vida lleno de experiencias. Estas generan una peculiar forma de ser y comportarse, por si las diferencias genéticas no nos hicieran tan particulares la vida nos agrega ingredientes personales, que nos perfila como únicos en el universo. Amaral ha recorrido un largo camino lleno de obstáculos que ha superado con entereza. ¿Como pedirle que corra de un forma distinta a lo que él es?, un hombre que pone todo lo suyo en la lucha por la vida.
La entrevista con José Amaral me ha traído a la memoria una frase de Simón Bolívar: “Iré hasta el corazón del racismo y lo incendiare”. Habla de grandeza de Bolivar y ratifica como la discriminación ha sido fuente inagotable de explotación del hombre por el hombre por siglos.
Rudemar Antonio Blanco Oliva.
José Amaral

Un corredor eficiente.

Blanco: ¿Nombre?
Amaral: José Manuel Amaral

Blanco: ¿Edad?
Amaral: 47 años.

B: ¿Casado?
A: Separado.

B: ¿Dónde vives?
A: Actualmente estoy viviendo en Pando

B: ¿Cuánto hace que corres?
A: Hace tres años.

B: ¿Tu mejor tiempo en diez kilómetros?
A: 35 minutos y segundos en Rió Branco. En esa carrera había buenos corredores, incluso algunos brasileros, yo entré tercero. No se bien la forma en que midieron los 10 kilómetros que corrimos. Después hice en treinta y siete, treinta y siete en la Agrupación.

B: ¿A qué edad?
A: Fue hace tres, y dos años, tenía ya 45 años.

B: ¿Otros deportes?
A: He hecho fútbol, mountain bike, karate, pentatlón.
También jugué al fútbol en Wanders de Pando, en Huracán 28, y dos o tres cuadros más. Con Huracán 28 salimos campeón de segunda division y vicecampeones de primera.

B: ¿Y de niño que deporte hiciste?
A: De chico me gustaba el deporte pero no se podía porque había que trabajar.

B: ¿A qué edad empezaste a trabajar?
A: Empecé a los 7 años.

B: ¿En qué?
A: Y bueno, quinta, aserradero, esas cosas. Cargaba los camiones en el aserradero, hacía la quinta, después que venía de la escuela.

B: ¿Y después hasta los catorce?
A: Después fui peón de tambo, ahí había que ordeñar, plantar y cosechar forraje, después cuando tenía trece años hice una zafra en una arrocera, se estivaban las bolsas de arroz y se cargaban los camiones.
Cargábamos los camiones que iban a la chacra en busca del arroz.

B: ¿Cómo era eso?
A: En un rincón de la chacra se va estivando las bolsas de arroz, haciendo escaleras con las mismas bolsas hasta llegar a 4 o 5 metros de altura para facilitar después la carga de los camiones.

B: ¿Y eso lo hacías con trece años de edad? ¿Cuánto pesaban las bolsas?
A: Si, lo hacia con trece años. Todavía iba a la escuela. Las bolsas eran esas de arpillera que pesaban unos 50 kilos.
Después a los catorce trabajé en un horno de ladrillos, se preparaba el barro, se les daba la forma, se dejaban secar y después el adobe seco se apilaba para quemar.

B: ¿Terminaste la escuela primaria?
A: Si a los trece. Fue el estudio que se pudo hacer.

B: ¿Por qué?
A: Había que trabajar, no se podía estudiar. De los catorce a los dieciocho años trabajé de peón de estancia.

B: ¿Qué hacías en la estancia?
A: Está el peón casero que es para limpiar los galpones, carnear, ordeñar, picar leña, y el de campo eso los primeros años, después salí al campo, que es el que sale a cuidar, curar, marcar, arrear, esquilar el ganado, ahí se trabaja de sol a sol. Yo hice las dos cosas. De los 7 a los 18 ese era el único deporte.

B: ¿Dónde quedaba la estancia?
A: En los Higuerones que queda entre Cerro Largo y Treinta y Tres.

B: ¿Naciste por ahí?
A: No, yo nací en el Chui. Soy oriundo del Chui, de Rocha.

B: ¿A los 7 años estabas por el Chui?
A: No a los siete ya me había ido, estaba con una familia que eran los que tenían el aserradero.
Ellos me criaron un tiempo. Mi madre me envió con ellos, le costaba mantenernos.

B: ¿Estando con ellos empezaste la escuela?
A: Si y después el trabajo. Si bien ya de muy grande tuve suerte e hice cursos de, primeros auxilios, auxiliar de enfermería, computación, repostería, auxiliar de servicio. Los conocimientos que adquirí los aplique en la comisión barrial en Barros Blancos. Logramos que el asentamiento se convirtiera en Villa Barros Blancos, también ahí se creo la Casa de la Cultura donde hacíamos quince cursos de formación, fue el proyecto cultural Rubino para Barros Blanco. Fui presidente de la comisión y se logró el saneamiento para el barrio. Todos éramos honorarios y trabajábamos para la comunidad.








B: ¿Donde hiciste pentatlón?
A: En el ejército. Incluía 8 kilómetros a campo traviesa, lanzamiento de granada, tiro, natación, estuve seis años en el plantel y los seis años salimos campeón. Era una brigada que competía con otras del resto del ejército. Una brigada estaba compuesta, vamos a decir, por tres cuarteles. Estuve cinco años en la selección de fútbol y estuve también en el plantel de tiro. Fui instructor de Karate también.Cuando me lesioné pasé como escribiente.

B: ¿Estuviste en el ejército?
A: Si y me jubilé por motivos de salud. Tenía un problema de columna. Ingresé en el año 1978 y estuve trece años.
B: ¿Durante la dictadura?
A: No, ¡ah si! Pero ya los momentos de los grandes cambios en la sociedad no me tocó vivirlos. Se hacía custodia de cárcel y eso, pero ya no se hablaba de lo que había pasado.

B: ¿Qué tareas hacían?
A: Se hacía de todo un poco. Se limpiaba como en todos lados, después trabaje en tareas del INDA, se repartía la comida, trabajé en comisión en el Hospital Militar. Estuve dos años.

B: ¿Qué te aportó el ejército?
A: Me sirvió porque ahí con el carácter y la disciplina se aprende mucho. Te hace humilde, ahí te ponen con los pies en la tierra y aprendes a trabajar con la demás gente.

B: ¿Por qué ingresaste?
A: Siempre quise alistarme, yo creía de chico que ahí ya no me iba a mandar nadie. Quería ser grande para alistarme.
B: Pero fue al revés.
A: Si. Ahí te mandaban todos. (Se ríe). Pero ahí se aprende mucho.

B: ¿Si pudieras que cambiarias con relación al ejército?
A: Hoy en día… pero no hoy en día, siempre se arrastra ese trato con el personal subalterno. Hay gente que se pone una tira en el hombro y se olvida todo lo que pasó de abajo ¿no? Creo que el trato sería uno de los grandes cambios. Está también el problema del sueldo, y el tema de la vivienda creo que un cinco por ciento tendrá una, el resto está en una situación difícil.

B: ¿Tu madre?
A: Mi madre cumplió 71 años, vive en María Albina dpto. de Treinta y Tres.
Si bien yo no me crié con ella tenemos una buena relación. Ella luchó mucho y si bien no nos pudo tener con ella a los hermanos mayores, estamos junto con ella Hoy en día es difícil contentarse con eso pero si ella no nos hubiera hecho eso, sería difícil que hubiéramos logrado ser unas personas de bien.

B: ¿A que edad te fuiste?
A: A los cinco años, estuve con una familia.

B: ¿Donde te fuiste a vivir?
A: Me fui con una gente que me crió durante dos años, después me fui por dos o tres lados más hasta que empecé a trabajar de firme, eso por los trece años.

B: ¿Tu padre?
A: Mi padre lo conocí poco, Era una persona violenta y aparte tomaba mucho,
fue cuando mi madre se fue y nos vinimos para Treinta y Tres. Pienso que me gustaría conversar con él, hay que saber perdonar, por una cosa y por otra, no he podido estar con él si vive todavía. Es fácil rechazar pero lo correcto es perdonar.

B: ¿Casado?
A: Separado, hace nueve años que tengo una compañera. Tengo un hijo.

B: ¿Nacional, cuando y por qué?
A: Si bien era simpatizante de Nacional cuando empecé miraba las condiciones físicas de la gente que tenían y no me consideraba como para correr con ellos.
No me consideraba como para correr con Nacional. Bueno, tuve la suerte que Hector me tirara unas líneas ahí y tuve la suerte de correr para Nacional.

B:¿Cuando empezaste a correr?
A: Este año, el año pasado corrí para la Agrupación X.

B: ¿Eres hincha de Nacional?
A: Si, si soy hincha de Nacional, desde chico era simpatizante de Nacional.

B: ¿Algo que quieras destacar de Nacional?
A: El compañerismo.

B: ¿Corriste alguna maratón?
A: Corrí una en Colonia la primera de Colonia y pusimos los pies en la tierra que si no se está bien entrenado no se puede correr.

B: ¿Llegaste, qué te impresionó?
A: Si, pensaba llegar en tres horas y medias pero no se entrenó nada.
Ese calculo por lo que había hecho en los 21 kilómetros. Es una carrera linda y después, por ejemplo, como todo el mundo dice son dos carreras en una, una hasta los treinta… yo lo viví muy claramente porque hasta los treinta y cinco venía muy bien y venía ubicado entre los cien primeros, y luego el tiempo que se hecho cuatro horas y pico.

B: ¿Y cómo te sentiste?
A: Es muy difícil creo que es más grande el deseo de llegar, que lo que uno siente el cansancio, pero yo caminaba dos cuadras y trotaba una para llegar, así fue que pude llegar convenciéndome a mi mismo.

B: ¿Qué te pasaba, sentías hambre, sed, agotamiento…?
A: Si sentía hambre, se siente como un frío, o sea el cuerpo se descompensa totalmente, calambres, corría un poco y caminaba después. Venía entre los cien primeros y después terminé como en el lugar doscientos.

B: ¿Practicas alguna religión?
A: Dios está demás decirlo es el supremo. He tenido la suerte de leer la Biblia, y he conocido muchas religiones. Lamentablemente lo que nos pide la Biblia para ser felices es muy poquito pero no se cumple.
Hoy en día estoy en un grupo de Gnosis que estudia el propósito por el que estamos acá… y a veces vivimos estamos y morimos y no sabemos que vinimos a la tierra.
Es un curso que tiene dieciséis clases y se trata de conocer por que estamos en la tierra.

B:¿Quién es dios?
A: Es el creador de todo el Universo. Si preguntamos de donde salió una planta… es lo más lógico de algún lugar tiene que haber salido. Es el creador máximo.

B: ¿Por el color de tu piel de descendencia africana te han discriminado?
A: No, creo que debo ser uno de los agradecidos, ya que la discriminación esta en primera plana en algunos lugares, creo que debo ser uno de los agradecidos que no me ha tocado en carne propia. Creo que uno tiene que dejar en alto la raza de uno.

B: ¿Sabes de donde provienen los blancos europeos?
A: Más o menos, lo que yo he podido leer es que la gente a medida que se fueron apartando del África, que es donde aparecieron los primeros hombres, fueron cambiando de clima, y se les fue aclarando la piel.
B: Al necesitar los rayos solares fueron perdiendo la melanina de la piel.
B:¿Y el tema de la discriminación?
A: Es un tema común, uno ve un chino y se ríe por que es chino Es un tema de la comunidad. Un blanco va a un país de negros y lo ven mal también.

B: Si marrón porque es marrón, si es alto porque es alto, si es bajo por bajo, si es viejo por viejo, si es mujer porque es mujer, si es pobre por pobre, necesitamos aumentar nuestra autoestima y les damos descalificación a todos. ¿No?
A: Si, es así. A veces uno sale a trotar y dice: ese pobre no corre, o el otro dice: ese loco que vive corriendo.

B: ¿Y el esclavismo?
A: Fue un acto de poder, una cuestión de de comercio, así la raza negra como a los últimos indígenas los hicieron esclavos. El asunto no era el color de la piel, esclavos ha habido de todos los colores.

B: ¿Un susto grande?
A: Salvo una vez (no tuve otro) cuando chico que venía un ómnibus de ONDA y yo me bajé de un camión y cruce por delante sin ver y casi me mata. Tuve que tirarme a la cuneta, sino me agarraba.

B: ¿Una suerte o una desgracia grande?
A: Si una suerte… (Se ríe) y una desgracia tampoco salvo el tener que irme de chico de mi casa. ¡Eso es bravo!...

B: ¿Cuál fue tu sensación cuando te separaron de tu madre?
A: Este…bueno, es una sensación de abandono que se siente, se siente en ese momento…bueno lloré mucho pero después la vida continúa.

B: ¿Y como arreglaste para vos después esa situación? ¿Sentiste que ese era un mejor lugar…?
A: Bueno…Yo creo que a pesar de las mejores posibilidades que uno tenga la familia es la familia, si bien hay amistades que son buenas amistades, la familia es sagrada.-

B: ¿Qué aspectos negativos te produjo la separación?
A: Uno se crea una coraza, se hace duro, a veces también se saca la coraza.

B: ¿Y deprimirte a veces?
A: Si, a veces uno se deprime, pero se hace más fuerte de lo que es. Pero bueno, hay que resolverlo.

B: ¿Si fueras presidente que cambiarías?
A: La pobreza.
B: ...que tristeza. Como dice la canción de Zitarrosa.


Rudemar Antonio Blanco Oliva. 26/9/2008.

martes, 4 de noviembre de 2008

Ciclo de Trico Entrevistas Carlos Cirone


A Cirone su salud lo trajo a las competencias, y él consecuente con su objetivo corre de tal forma que se puede percibir que cada carrera lo ve victorioso llegar a la meta. Su éxito consiste en que es capaz de recorrer largas distancias a un buen ritmo,
como para poder demostrar que goza de un estado de salud excelente. Para mí éste es otro reportaje a uno más de los muy buenos compañeros del equipo. Ello me dice que puedo alcanzar la trabajosa meta de incluirlos finalmente a todos.
Rudemar Antonio Blanco Oliva.


CARLOS CIRONE. Corre por su salud.


Blanco: ¿Datos personales?
C: Me llamo Carlos Cirone, 53 años, nací en Montevideo, soy descendiente de italianos y mi familia toda nació y vive en Italia.

C: Mi padre fue prisionero en un campo de guerra alemán, y bueno nada… del campo nunca me contó nada, alguna vez aclaró que no era un campo de guerra de exterminio, no era un campo de guerra judío,..
B: Y de algunos otros además de judíos.
C: Si, Si…

B: Algo más que te haya contado
C: Le enseñaron un oficio, ¡Increíblemente! Eso si les prohibían ocultar cualquier cosa sobre los judíos. Cuando volvió a Italia enseguida empezó a gestionar para irse de Italia, dejó a toda su familia entre ellos su novia, a mi madre. Se vino para acá e incluso mi madre, su novia, se quedó en Italia y para que viniera se casaron por poder, se casaron ella allá y él acá.

B: ¿Dónde vivían?
C: Ellos son del pueblo de Loreto, de Péscaro sobre el Adriático.
Sus familias eran vecinas, fueron novios a los quince años y se casaron a los treinta. Mi padre volvió de la guerra y empezó a buscar donde irse y se vino para acá, llegó en el cincuenta. Se casaron por poder mi padre acá y mi madre allá. Yo soy el menor de sus hijos y tengo un hermano. Tengo tres hijo y un nieto. Mi hijo el mayor tiene 29 años y tiene un hijo.

B: ¿Tus estudios?
C: Primarios, secundarios, y terciarios Empecé abogacía, que no terminé.

B: ¿Tu primer trabajo?
C: Mi primer trabajo fue cuando terminé quinto año de escuela. Recuerdo que yo quería que mi padre me comprara una bicicleta de carrera. Él entonces me dijo gánatela. -¿Y cómo me la voy a ganar si no tengo trabajo? –Yo te consigo trabajo. –me dijo.
El era amigo de Primo Zucotti, habló con él que tenía una casa de ventas de bicicletas y fui a trabajar ahí para cuidar las bicicletas que ponían en exhibición en la vereda.
Yo me sentaba en 8 de Octubre y María Estagnero de Munar, en un costado estaban todas las bicicletas en exhibición. Yo me sentaba al lado para que no las robaran, (se ríe) yo tenía diez u once años, claro, me podían robar a mí con las bicicletas, pero en aquella época no robaban como roban hoy, es otra cosa.
Eso lo hice dos o tres años lo que me permitió todos los años cambiar de bicicleta.

B: ¿Tu padre en qué trabajaba?
C: Mi padre fue obrero de la construcción, se dedicó a una tarea distinta que era la que aprendió de tornero mecánico. Y después trabajó en una pequeña empresa de él.

B: ¿Por qué de Nacional?
C: Yo nací en el sesenta y en esa época Peñarol se ganaba todo y los gurises eran de Peñarol. Creo que yo de contra me hice de Nacional.
Cuando todo el mundo festejaba los éxitos de Peñarol yo también festejaba, porque había un señor que era el abuelo de un amiguito de aquella época que me decía que gritara por Peñarol, que si no no me llevaba a jugar al fútbol a la placita y no se que otra cosa, entonces yo gritaba por Peñarol.
Pero por detrás yo era de Nacional. Y después, para mí, Nacional es lo máximo.
Viví muchas cosas con Nacional yo soy de los que en el 80 fuimos a Porto Alegre. En Agosto de 1980 estuve en el famoso empate en Porto Alegre al que fuimos 20.000 uruguayos.
Nacional es mucho para mí, he trabajado en las divisiones inferiores durante muchos años.
B: ¿A correr empezaste hace mucho?
C: Empecé a correr no hace más de cuatro años. En Nacional hace dos años, éste es mi segundo año.

B: ¿Tu mejor tiempo?
C: Ahhh. Apenas 51minutos los diez kilómetros y nunca lo volví a repetir. Nunca le vi la cara a los que ganan, tendrían que esperarme mucho. No me preocupa, no me molesta.
Siempre recuerdo que en mi primer año de libre al principio te ganaba, después por mucho tiempo me ganaste y ahora no se que te pasa que te gano yo.
Vos me decís: -vos mejoraste. - pero yo no mejoré eres tu que empeoraste.
B: Es cierto, seguramente se debe a que para ganar la categoría no tengo que hacer tanto esfuerzo este año. El año pasado corrí carreras por debajo de los cinco minutos el kilómetro, los otros de la categoría me obligaban, y éste año no lo hice ni una vez. Yo ahora soy ese a quien le ganas.

B: ¿Tus actividades formales cuales fueron?
C: Mi primer trabajo fue de cadete en una farmacia y con los medicamentos sigo enroscado hasta hoy. Actualmente gerencio una empresa que vende medicamentos y artículos de tocador y logística para la producción de medicamentos.
Trabajé en farmacia durante años, trabajé de visitador médico, en una distribuidora de medicamentos. Trabaje en el laboratorio Abbot.

B: ¿Cuáles son las cosas más importantes a la hora de hacer funcionar una empresa?
C: La primera cosa el recurso humano, si no tienes el recurso humano no puedes hacer nada. Yo puedo tener una muy buena idea para llevar adelante, un proyecto, una estrategia, algo, pero si no tienes el recurso humano adecuado a esos efecto que lo lleve adelante no puedes hacer nada.
Entonces: el recurso humano, la honestidad, el trabajo, el orden, ser prolijo y “ponerle horas”. Es difícil lograr algo sin ponerle horas.

B: ¿Qué condiciones debe tener el personal de una empresa?
C: El recurso humano debe tener una actitud más allá de lo económico. Todos trabajamos por dinero pero si a eso le ponemos un poco de corazón vamos a lograr las metas que nos hemos trazado mucho más rápido.
El recurso humano tiene que estar involucrado en el proyecto que vos le presentas, sentirse apoyado permanentemente, no sentir que son menos ni más que otros,

B: ¿Alguno es más importante que el otro?
C: Yo también creo que todos somos iguales. Siempre hay uno que lo gerencia, uno que lo haga, uno que lo empaquete, alguien que lo venda, alguien que lo cobre, pero si falla una de esas cosas falla todo.
Para mi el trato debe ser igualitario para todos, yo soy uno más como ellos y escucho las ideas que me puedan aportar, por que sus ideas son más importante que las mías.

B: ¿Profesas alguna religión?
C: Católica, yo fui a escuela católica, en la calle Comercio. Nací en Bitruvio cerca de la cantera de los presos. Soy de los que nací en mi casa y fui asistido por una madama,
Mis padres, como casi todos los italianos, eran de religión católica.

B:¿De modo qué crees que hay un dios?
C: Dios existe, la raza humana se acuerda de dios en las buenas y en las malas, y en las malas es cuando lo ponemos en dudas. ¡Si!, dios existe, yo no soy de ir a la iglesia no se si es porque… Fui managuillo, yo soy de la época en que todavía te castigaban. A veces uno pone en duda muchas cosas cuando ve niños pequeños morir de cáncer u otros que se mueren de hambre.

B: ¿Y la escuela cómo era en esos tiempos?
C: La directora todos los días me pegaba. Yo apostaba figuritas, decía vas a ver que ahora me pega… me movía un poco de la fila y venía y me pegaba, te cascaban todo los días, pero creo que yo tenía la culpa.Yo les decía a mis compañeros: -Voy a correrme de la fila y te apuesto figuritas a que me pega, y para mi era un negocio me hacía de figuritas. A mí padre un día le dije que la directora me pegó. Me contesto: -Algo habrás hecho. Fue ha hablar con la maestra y le dijo que cuando ella tuviera que hacerlo lo hiciera sin problemas. Se lo dijo en el itali-español que él nunca dejó de hablar.

B: ¿Qué puedes decirme de tu madre?
C: Mi madre una “crack”. Hace unas pizzas y unos ñoquis increíbles. Mi madre tiene ochenta y cinco años. Una mujer macanuda pierna. Cocina muy bien, básicamente toda cocina italiana Es una fenómena, vive cerca de mi casa…

B:¿Y tu esposa? C: ¡Mi mujer bien! Una fenómena, además de sus tres hijos ella tiene un salón de peinados en mi casa, hace treinta años que lo tiene; está cuidando en las horas de la mañana al primer nieto que tenemos…
B: ¿Por qué corres?
C: Bueno mi padre fue operado del corazón y a los dos años hizo su
primer viaje de placer, bajó en el aeropuerto de Toronto Canadá y
cayó muerto en el aeropuerto.
A mí a eso de los treinta y siete, treinta y ocho años me empieza a
aparecer colesterol alto.
Entonces fui a ver un médico muy prestigioso y me dice: - ¿fumas?
-Si - le dije. -¡Qué lástima un muchacho tan inteligente! –me dijo eso
y me hizo un trabajo tan fino que salí de ahí y no fume nunca más.
Me molesto tanto lo que me dijo que hasta el día de hoy no fumé.

B: Un premio increíble y no se equivocó al decirte que eras inteligente.
C: Fumé veinte años y hace quince que no fumo.
Entonces después caminé, caminé, la cuestión es que por la cuestión
de mi padre y esto del colesterol caminé, camine y caminé…hasta que un amigo me dijo: -¿por qué no corres?
La primera vez corrí cien metros y tenía los pulmones en la boca,
ahora corro veinte kilómetros, parece mentira.
Corro porque me gusta pero me parece que no es un vicio.
B: El cuerpo te puede pedir cosas correctas y cosas incorrecta, el vicio
es nocivo, el correr controladamente como lo haces es saludable.
C: Para mi correr o entrenar es parte de mis tareas diarias. Es como si
fuera una entrevista de trabajo o parte de mi tarea. Hago de cuenta que estoy con un cliente o con un proveedor, esa hora es para eso y
pronto.

B: ¿Ves Televisión y cine?
C: Me gusta pero veo muy poco. En mi casa siguen viviendo mi hija de veinte años y se ve televisión. De cine quiero decirte que hay tres películas para mí, por este orden: El Padrino 1, El Padrino 2, y El Padrino 3.
B: ¿Y Bonny And Clyde?
C: Todo lo que sea de la mafia me apasiona, me encanta, me encanta
ese tema…mira, yo iba a Italia y cuando fui a Palermo, me hervía la
sangre al entrar en esos bolichitos chiquitos en los que te miraban y
uno le decía al otro - ¿y éste quién es? Y uno de los tíos y primos que
tengo en Nápoles se acercó y les dijo quien era yo, que vivía en
América, le tuvo que explicar todo. Y después enseguida se abrieron
todas las puertas y nos invitaban a tomar.

B: ¿Del funcionamiento de la Agrupación Atlética del Uruguay cual es tu opinión?
C: Yo no puedo opinar por que no estoy ahí. Sólo a veces me mata esperar el comienzo de las carreras, eso me molesta. La gente critica sin saber lo difícil que debe ser eso. Para cambiar hay que ir trabajar, ver y cambiar.

B: Siempre me pareció muy bien que la Agrupación la dirigiéramos los propios atletas. ¿Y a Nacional de Atletismo cómo lo ves?
C: Nacional es el esfuerzo de unos pocos para otros muchos, yo me considero uno de los muchos. Mi tiempo es muy limitado y hago lo que puedo. Tengo mucho tiempo laboralmente, y si no, no vería ni a mi familia. Entonces digo: voy a tratar de repartir.

B: ¿Algún susto grande?
C: Cuando me llamaron por teléfono de Canadá para decirme que mi padre había muerto. Yo estaba esperando la llamada de mi primo, me acuerdo que había comprado una pizza con muzarella, todavía debe estar ahí, porque claro no se tocó, y suena el teléfono me llama mi primo, y yo le decía: Hola todo bien…y yo le hablaba y el me decía: -Carlos déjame hablar que tengo que decirte algo, y cuando lo dejé hablar me salió con esa. Mi padre hacía sus cuidados postoperación caminaba diez kilómetros de mañana y diez de tarde. A pesar de la operación al corazón nadie podía esperar nada de eso.
Y también recuerdo otra situación: mi hijo el mayor fue operado de trasplante de cornea a los dieciocho y a los veinte años.

B: ¿La mayor alegría?
C: El nacimiento de mis tres hijos.

B: ¿Problemas de salud?
C: Fui operado del apéndice por una apendicitis y después de la vesícula.

B: ¿Qué mejorarías en el País?
C: ¡Y en el País se ha cambiado!, el país está cambiado. La mayoría de los cambios creo que han sido beneficiosos. Sabes que me parece que se les está yendo de las manos entre libertad y libertinaje. Resulta que ahora todos queremos beneficios, aumentos de sueldo, ¡todo bárbaro!
Hace cien años que estamos así y ahora le pedimos todo a éstos. ¡Guarda que no se si esta vaca da tanta Leche! Fíjate que en cinco año queremos que éste gobierno nos resuelva en cuatro años todo lo que no se hizo en ciento cincuenta.

B: ¿Cómo lo definirías a Cirone?
C: Una buena persona. Alguien que se conmueve con poca cosa y que le da mucha tristeza ver la pobreza, ver niños pidiendo, y los dramas familiares. Creo que soy un buen padre aunque eso lo deberían decir mis hijos y no yo.
En fin…creo que he hecho muchas cosas buenas, y no estoy en la vida para pasarla, no para sobrevivir, yo disfruto de la vida., yo vivo bien.

B: ¿Y una gran complicidad con el azar?
C: ¡Si! Haber comprado una rifa que me vendió un cliente. Yo le dije que no la quería, insistió, insistí, pero no tuve más remedio que comprársela. Al final yo le vendí una a él, me dijo: toma ésta y me das la otra. Todavía tuvo que darme cien pesos porque la mía valía más.
Me saqué dos pasajes a Europa con siete días de estadía.

B: ¿Algún deportista que hayas admirado?
C: Si, Luís Artime en el fútbol, En otras áreas dos ídolos que después se me cayeron, Mike Tayson y Bent Jonhson. Uno siempre con problemas, tenía mucha fuerza y poca cabeza, y el otro repichicatero, se mataba con las drogas para aumentar el rendimiento.

B: ¿Algo qué te falte decir? ¿O cuál es tu condición más saliente?
C: En esta etapa de mi vida te digo que todo lo que me he propuesto lo he logrado, probablemente el factor suerte haya influido mucho. Te digo también que cada vez que me caí me supe levantar, y bastante rápido a veces, que ni siquiera nadie lo ha notado.
Como buen uruguayo soy bien agarradito y ni cuando la ruptura de la tablita o en el 2002 tuve problemas grandes. Tengo un defecto grande no soy hincha de la selección uruguaya de fútbol, nunca sentí la camiseta. Y mi condición más saliente es que considero que todos somos iguales, pero no sólo lo creo sino que lo practico.

Rudemar Antonio Blanco Oliva.
27/10/2008